Aparte de significar delgado, en San Juan se usa cariñosamente para referirse a una persona sin importar su tamaño: ¡una forma de llamarte pana (amigo) y hacerte sentir especial!
¡Eh, flaco! ¿Vamos por unas empanadas antes de que el Quilmes se caliente?
Se usa para referirse cariñosamente al novio o pareja, sin importar su tamaño real. ¡Hasta el más fornido puede ser 'flaco' aquí!
Oe, flaco, ¿vamos a comer un cevichito después de la uni o estás con roche?