Expresión madrileña para describir una situación que se ha salido de control de manera épica, más allá del típico desastre.
Salimos a tomar algo tranquilos y acabamos montando una liada parda; ¡el bar terminó cerrando por nuestra culpa!
Expresión utilizada para describir una situación que se ha complicado inesperadamente, al estilo de una buena bofetada del destino.
Íbamos a tener un finde tranqui en casa, pero trajimos a Pepe... ¡y menudo liada parda montamos anoche!