Una forma astuta de referirse a irse a medias en un plan: sea una salida, un gasto o hasta repartir culpas. Nadie se salva de poner su parte.
¡Dale compadre! Si nos agarran con esa locura, hacemos mitad y mitad en las explicaciones.
Frase mágica que emplean los amantes de los buenos burritos. Esto significa que quieres un burrito con dos tipos de guisados diferentes, porque la vida es demasiado corta para elegir solo uno.
Se me antojaron el chile relleno y el deshebrado, así que pedí mi burrito mitad y mitad para matar la gana.