Expresión utilizada cuando alguien da una reprimenda fuerte o se enoja y confronta a otro de manera intensa. Es como repartir golpes, pero solo con palabras afiladas.
Cuando vio el desastre que dejaron sus hijos en la casa, se puso a repartir leña hasta que los dejó calladitos.
No es cosa de bomberos, sino una expresión para referirse a salir de fiesta con la intención de liarla parda y terminar hasta arriba.
Este finde vamos a repartir leña en los pubes, agarraos que vienen curvas.