Frase utilizada para referirse a alguien que insiste tanto en algo que termina haciendo más ruido que una txalaparta desafinada.
Aitor lleva toda la semana dando la matraca con lo de ir al monte, ¡como si no supiéramos ya el camino de memoria!
Expresión utilizada para referirse a alguien que no deja de insistir o molestar, como una matraca que no para de sonar.
Mi hermana pequeña no paraba de dar la matraca anoche con qué quería ir al parque. ¡Al final tuve que llevarla!